La nube en los últimos años ha alcanzado su plena consolidación, abriéndose paso entre la gran variedad de tecnologías que permiten agilizar la puesta en marcha de modelos digitales.
Los orígenes del término “nube”, comúnmente se asocian al término que se derivó de una metáfora que tomaba como base al dibujo de nubes que se utilizaban en el pasado para representar a la red telefónica, y que posteriormente algunos comenzaron a representar al Internet.
Ahora bien, la nube (y aunque siguen existiendo dudas al respecto) en menos de una década, se ha convertido en un aliado para aumentar, mejorar e innovar servicios, teniendo un impacto directo en la economía de las compañías que se han decidido a probar alguno de sus servicios. Y es que, con el paso del tiempo, la “computación en la nube” se ha comenzado a ver como una forma viable de “consumir” servicios informáticos.
La historia y evolución de la nube
La nube ha estado continuamente evolucionando, y es importante dar un breve repaso a esta evolución. Algunos comentan que comenzó por los años 50’s - 60’s. Aparece el nombre de John McCarthy a quien se le adjudica que introdujo este concepto y también el concepto de inteligencia artificial. También aparece el nombre de Joseph Carl Robnett Licklider, quien describe su concepto de Galactic Network (Red Galáctica), como una red interconectada globalmente a través de la que cada uno pudiera acceder desde cualquier lugar a datos y programas.
Durante las siguientes 3 décadas, las empresas a nivel mundial comenzaban a necesitar consultar grandes volúmenes de información y la necesidad de consumirla desde distintos lugares de acceso. Pasando por la creación de la Word Wide Web a finales de los 80’s.
Uno de los mayores avances que se vio fue en los 90’s, donde se afianzo el concepto de virtualización y a finales de esa década, se produjo un gran anuncio que comenzó la 1er ola de la nube: Salesforce. Se trataba de un nuevo concepto, con el que se pretendía ofrecer aplicaciones empresariales a través de una página web simple.
En los 2000’s, apareció AWS y Google con servicios en nube. Tomaron fuerza compañías como Netflix, entre varías más. Y fue así que las grandes empresas de informática comenzaron a interesarse por los servicios de Nube y comenzó la innovación y desarrollo de los diferentes tipos de nubes: privada, pública e híbrida.
Hay un actor al que también se le debe mencionar cuando se habla de computación tradicional y en la nube y es “el Internet” uno de los culpables de una transformación global, impactando seriamente en el relacionamiento social a distancia y proponiendo nuevas maneras de hacer negocios, lo que ha dejado como ganadores a los consumidores ya que se generaron una variedad de productos, servicios y soluciones para mejorar su calidad de vida.
La nube y su impacto en la actualidad
Ahora en la última década, “la nube” paso de ser algo que los proveedores de servicios ofrecían a las empresas y que insistentemente recomendaban adoptar, a ser un elemento necesario para la transformación que la mayoría de las empresas hoy en día buscan y necesitan.
Hoy en día dónde los datos forman parte vital de la gran mayoría de las compañías y que se ha dado paso a conceptos como el Internet de las cosas (IoT) incluyendo puntos como el BigData, Machine Learning, Inteligencia Artificial, entre otros puedes darte cuenta de que es esencial para la vida tal y como la conocemos. Cada vez comienzas a escuchar más sobre Serverless, en el ámbito de desarrollo los Containers asociándolos a DevOps.
Sin duda alguna, la nube hoy está en tu día a día y cada vez estás consumiendo más de sus servicios sin darte cuenta. Toma en cuenta que también tus consumidores pedirán nuevos servicios, se seguirán transformando los negocios y aparecerán nuevas ofertas. Y con ello, más y nuevos retos como el 5G, IA, Edge Computing y XaaS.
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