Hoy en día, el auge y demanda de servicios y aplicaciones en la nube tanto para el entorno corporativo como para el particular hará que el mercado de la nube pública crezca hasta superar los 1.590 millones de dólares en 2020. Un crecimiento que se presenta imparable, ya que el 95% de las organizaciones prevé mantener o incrementar sus inversiones en software como servicio (SaaS) en los próximos meses. Se prevé que 2014 sea el año de inflexión de la nube ya que las empresas invertirán lo mismo en la compra de equipos de TI tradicionales que en servicios en la nube de pago por uso de diferentes proveedores cloud. Juan Antonio Herrero presidente y socio fundador de afirmaGroup, explicó, “No estamos ante un cuestión tecnológica sino ante un cambio cultural que nos lleva hacia la nube”. El experto también comenta,“Cloud lo que trae son múltiples beneficios como la simplificación de la gestión del software o el no tener que invertir en activos sino pagar por su uso”, así mismo afirma,“pero sobre todo crea un nuevo ecosistema digital en el que los consumidores lo que buscan es informarse y encontrar contenidos con los que sentirse identificados”. De acuerdo con este nuevo enfoque, para migrar con éxito a la nube las organizaciones deben:
- Conocer lo que compran: Las empresas deben de estar conscientes de que no compran desarrollos a medida y deben estudiar la oferta que le están haciendo, qué procesos soluciona y cómo pueden aprovecharlo sin necesidad de tener que hacer inversiones adicionales.
- Confirmar lo que incluye el servicio: Las empresas deben confirmar si el servicio que contratan incluye formación online, soporte web, llamadas telefónicas entre otros elementos necesarios o indispensables conforme al giro de la empresa y lo que desean proteger.
- Adaptarse al nuevo ciclo de venta: Los vendedores son gestores administrativos que ayudan a descargar un programa o a tramitar un pedido, por tanto, las empresas deben revisar los costos de sus procesos de venta, para que todo se realice de forma remota, con servicios en “paquete” y al más bajo costo.
- Comprender el cambio del ciclo de marketing: Las empresas en el cloud no deben buscar a sus clientes, son éstos los que encuentran a las empresas y demandan contenidos para sentirse identificados. Ahora es el marketing el que debe encargarse de todo el ciclo de relación con el cliente.
- Aplicar la regla del 80-20: A diferencia de ciclos de negocio anteriores, ahora las empresas deben invertir el 20% en ventas y el 80% en marketing para trabajar en tres etapas: Pre-clic marketing, que es el posicionamiento para que los consumidores las encuentren. Post-clic marketing, que es la generación de información y contenidos de valor para que el consumidor se sienta identificado. Post-conversion marketing, que es el análisis y cuantificación de los procesos anteriores.
- Hacer una planificación financiera: Las empresas proveedoras de servicios cloud deben hacer una buena planificación financiera y económica ya que pasan de vender los clásicos proyectos y licencias de software a prestar servicios de pago por uso cambiando completamente la cuenta de ingresos de las compañías.
- Analizar el impacto diariamente: Existen cuatro áreas críticas que hay que analizar y seguir a diario para no fracasar en la migración al cloud, éstas son las áreas de finanzas, marketing, ventas y operaciones.
- Buscar economías de escala: Un entorno 100% cloud significa estandarización, cero costo de propiedad, bajo costo de usabilidad, venta y gestión remota, paquetización de servicios, entre otros.Una empresa puede migrar a la nube con éxito si sus procesos de negocio están definidos en una aplicación que puede estar hosteada en el cloud y no cuenta con procesos muy personalizados.
- Evitar errores habituales: Siempre debemos recordar que los procesos de venta, la relación con el cliente y los modelos de negocio han cambiado, si se piensa que todo sigue igual se cometerá un gran error a la hora de migrar con éxito a la nube.
- Entender que el cloud forma parte de nuestras vidas: Más allá de las cifras de las diferentes consultoras, los hábitos de consumo digital y el auge del uso de dispositivos móviles, en particulares y empresas, confirman el cambio de la nube.